Os doy la bienvenida anhelando con ello, que esto sea el principio de una genuina relación a corto y largo plazo, basada en la mutua confianza procesada tanto por la pasión del arte, como de las antigüedades, que sin duda alguna, es lo que le ha llevado a este blog. Me resultará grato de saber, que todas las piezas y artículos que se muestran en la pagina, les resulten de un alto grado de interés. No olvidemos, que el arte es un mercado al alza… Enrique León © copyright
TRADUCTOR TRANSLATOR
lunes, 2 de octubre de 2017
La diosa Cibeles
Escultura de la diosa Cibeles. Roma. Siglo II-III d.C.
Mármol.
51 cm de altura
Procedencia colección particular V.L, Renania, Alemania. Adquirido en 1974.
Figura erguida dela diosa Cibeles realizada a partir de un bloque de mármol blanco cristalino fino. Únicamente está esculpida por la parte frontal y los laterales, la parte trasera sólo se alisó la superficie de la piedra. Este hecho indica que estaba colocada delante de una pared o nicho, es una obra conformada para ser vista exclusivamente de manera frontal.
A Cibeles se la representaba con vestimentas frigias, dado su origen, aunque en esta cultura se adaptó a la moda romana: tiene el cuerpo cubierto por un quitón, bastante ceñido, semejante a la túnica que fue llevada tanto por hombres como por mujeres de la antigua Grecia y que posteriormente adaptarían a los romanos. Sobre este tejido se ha añadido un himatión, desciende por el hombro izquierdo, cayendo en diagonal hacia abajo. cruzando el torso. Con la mano izquierda sujeta una cornucopia, también llamada "cuerno de la abundancia" y con la derecha sostiene una pátera, un plato poco profundo utilizado para la celebración de ceremonias y ritos.
Sobre la cabeza porta el tocado que la identifica, una corona con forma de muralla. Debajo, presenta el pelo cubierto por un fino velo que desciende por detrás de los hombros. Muestra un rostro sereno, con los ojos almendrados y una boca pequeña insinuando una leve sonrisa, enmarcado por el cabello a mechones cortos, llegando a parecer trenzado. El cuello se ha decorado con un amplio collar.
Además de estos atributos portaba las llaves que dan acceso a todas las riquezas de la tierra. Podía representarse montada en un carro que simboliza la superioridad de la madre Naturaleza, a la que incluso se subordinan los poderosos leones que tiran del mismo. En otras imágenes se sienta en un tono custodiado por estas bestias. Es este caso, puede verse a un león esculpido debajo de la mano derecha.
Cibeles fue originalmente una diosa frigia, era la diosa de la Madre Tierra, adorada ya desde el neolítico en la región de Anatolia. Se trataba de la personificación de la tierra fértil, una diosa de las cavernas y las montañas, murallas y fortalezas, de la naturaleza y los animales. Su equivalente romana era Magna Mater o Gran Madre. Es una deidad de vida, muerte y resurrección. Su consorte, cuyo culto fue introducido más tarde, era Atis. Se trata de una de las principales diosas de las antiguas culturas del Oriente Próximo. En la mitología griega también es conocida como Damia.
En los panteones griego y romano, Cibeles es identificada con Rea, esposa de Crono (Saturno) y madre de los principales dioses: Hestia (Vesta), Deméter (Ceres), Hera (Juno), Hades (Plutón), Poseidón (Neptuno) y Zeus (Jupíter). De acuerdo con la mitología griega, Cibeles inicia a Dioniso en su culto misterioso.
Buró escritorio con vitrina barroca
Buró escritorio con vitrina barroca. Norte de Italia, mediados del siglo XVIII.
Maderas de nogal, raíz de nogal y limoncillo. Interiores en madera de pino.
Medidas: 230 x 105 x 58 cm.
Buró escritorio italiano con vitrina de estilo barroco, realizado en madera de nogal, raíz de nogal y decorado con marquetería de limoncillo. Estructura de dos cuerpos, claramente compartimentada, con el cuerpo inferior dividido a su vez en dos. Su diseño es claramente arquitectónico, con un frontón partido superior a modo de arcada de medio punto y con cornisa de perfil ondulante en la parte alta. El cuerpo inferior presenta cinco cajones, el último corrido en la parte baja, con cerradura central, todas las cerraduras van enmarcadas por un sinuoso diseño vegetal de marquetería, no llevan tiradores. Este cuerpo inferior de cajones de estructura de recta y un corte neto, que nos indica que estamos aún en un momento de transición, presenta un faldón con línea rectas que se alzan sobre patas bajas en forma circular. Sobre este cuerpo de cajones se sitúa el escritorio, con tapa abatible inclinada, decorada también con marquetería en su cara exterior. En el interior deja ver una muestra de gran sobriedad, con varias calles, las laterales con parejas de gavetas cada una y la central con una puerta, decorada con una magnífica decoración en marquetería representando una escena de pesca. La marquetería, como en el resto de la pieza, sigue modelos netamente barrocos, con una composición rigurosamente simétrica a base de maderas en su color y teñidas, con roleos vegetales, hojas y flores, sobre fondo jaspeado, que se combinan con estas escenas bucólicas de caza y pesca ricamente trabajadas, como la central que decora la tapa del escritorio. El cuerpo superior del mueble presenta dos puertas, con recorte en arco superior de medio punto, que inciden en la idea arquitectónica del diseño, con perfil de curvas ingleteadas. Este cuerpo alto está enteramente decorado con marquetería de limoncillo, a base de motivos clásicos, cajeados, elementos vegetales, etc. Las puertas, una vez abiertas, muestran un espacio con varios estantes de perfil sinuoso, como se aprecia a través del cristal.
Desnudo
FALCONE, Francesco (Chiavari, Italia, 1892 – 1978).
“Desnudo”.
Escultura en bronce.
Firmada.
Medidas: 94 x 40 x 55 cm.
Escultura en bronce.
Firmada.
Medidas: 94 x 40 x 55 cm.
Escultura de bulto redondo en bronce representando a una bañista echando agua sobre su cuerpo de una pequeña jarra, una temática que bebe de la antigua iconografía de la toilette de Venus. Se trata por tanto de un asunto de gran sensualidad, que busca reflejar el ideal de belleza absoluto a través del cuerpo femenino.
Hijo de un artesano ebanista, Francesco Falcone realizó sus primeros estudios en la escuela de dibujo de su ciudad natal, y más tarde fue discípulo de G. Scanzi en la de Bellas Artes de Génova, de la cual será nombrado académico de mérito en 1924. Finalmente completó su formación en la Academia di Santa Croce de Florencia. Al principio de su carrera realizó algunos retratos a la pluma, y pronto comenzará a participar en muestras nacionales e internacionales, donde su presencia será constante en las décadas de 1920 y 1930. En estos primeros años se dedicará principalmente a la escultura en madera, con obras como “Baccanale”, de 1920, presentada en la exposición anual de la Sociedad para la Promoción de las Bellas Artes de Génova. En paralelo, comenzará a trabajar el bronce y el mármol, sobre todo en encargos de temática religiosa, como los monumentos funerarios realizados en 1923 para el cementerio de Chiavari, de marcado acento simbolista. También por estos años realizará diversos monumentos en bronce relacionados con la Gran Guerra, en distintas ciudades del área genovesa. Cultivará por estos años un estilo marcadamente neorrenacentista, patente en obras como el “San Juan” que expuso en la galería Micheli de Milán en 1928. Participará también en las Bienales de Monza, siendo galardonado con diploma de honor en 1923 pese a la controversia que suscitó su trabajo. Asimismo, en 1925 participó en la Exposición de Artes Decorativas de París, un año después de tomar parte por primera vez en la Bienal de Venecia, donde continuará mostrando sus obras en la década siguiente. En 1931 obtuvo la medalla de oro de la Bienal de Arte Sacro de Roma, y tras la Segunda Guerra Mundial expuso por primera vez en América, en la galería Müller de Buenos Aires (1949). La última fase de su carrera se caracterizará por la evolución hacia un estilo más netamente ochocentista, particularmente patente en sus retratos y en sus esculturas religiosas y conmemorativas, el grueso de su obra. Actualmente se conservan obras de Francesco Falcone en diversas iglesias de Chiavari, así como en la Galleria d'Arte Moderna Nervi de Génova y en diversas colecciones particulares y públicas.
Eleonora adormida
ESCALA Xavier (Barcelona, 1972).
"Eleonora adormida". 2011.
Material: cerámica.
Técnica: modelado en arcilla.
Medidas: 50x40x20 cm.
Material: cerámica.
Técnica: modelado en arcilla.
Medidas: 50x40x20 cm.
Licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla y diplomado en Escultura por la Academia de Bellas Artes de Carrara. Complementa su formación en el estudio Luigi Corsanini (talla en piedra) y Aron Demetz (talla en madera). Su obra ha recibido dos Premios Nacionales y forma parte de colecciones en España, Italia, Suiza y Rusia. A partir de 2014 establece su taller y residencia en Sant Cugat Sesgarrigues (Barcelona). Exposiciones. 2017. Sirena: Nina Murashkina, Xavier Escala. Art Penza Fine Art Gallery. 26 enero - 26 febrero. Penza, Rusia. 2016. Skulpturensommer. 21 June - 21 September. Davos Klosters, Suiza.2014. Skulpturensommer. 21 June - 21 September. Davos Klosters, Suiza. 2013. Figurativas 2013. MEAM (Museu Europeu d’Art Modern), Barcelona, 4 Octubre- 29 Diciembre. Concurs d’Escultura Pere Jou. Edifici Miramar, Sitges (Barcelona). 5 Octubre - 24 Noviembre. 2012. LXI Exposición de Otoño de la Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría. Casa de los Pinelo, Sevilla, 6-23 Noviembre. L’Accademia al museo. Museo del Marmo, Carrara (Italia). 15-29 septiembre. 2011. Mostra didattica “Pittura Scultura”. Fabbrica dei pinoli, Versiliana, Marina di Pietrasanta (Italia). 4-26 Junio. 2010. Xavier Escala, Ilaria Germano. Ex-Ospedale San Giacomo, Carrara (Italia). 25-27 Junio. Schnellkochtopf III. Nudreihof - Mittelstation Seceda, Ortisei (Italia). 28 agosto. 2007. I concurso de escultura ciudad de Atarfe 2007 (obra seleccionada). XIV Premio Nacional de Artes Plásticas “Universidad de Sevilla” (obra seleccionada). Facultad de Bellas Artes, Sevilla, 30 Enero a 29 Febrero (obra seleccionada).2005. XV Exposición de escultura en bronce. Carnicerías reales, Priego de Córdoba, Agosto.2005. Exposición de talla en piedra y madera. Centro cívico Las Sirenas, Sevilla, 2-15 Junio. 2004. LIII Exposición de Otoño de la Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría. Casa de los Pinelo, Sevilla, 3-28 Noviembre. PREMIOS: 2012. Premio el Corte Inglés S.A. Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría.2004. Premio de la Excma. Sra. Duquesa de Alba de Escultura. Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría.
Virgen con el niño
Escuela Peruana del siglo XVII.
"Virgen con el niño"
Óleo sobre lienzo.
Medidas: 81 x 66 cm; 108 x 95,5 cm (marco).
Marco de cedro.
En esta obra se presenta como protagonista a una Virgen de rostro juvenil que en sus brazos sostiene a su hijo, Jesús, acompañada de dos figuras que podrían identificarse como San José sosteniendo el lirio de la pureza y Santa Ana, madre de la Virgen, ataviada con su velo blanco sobre la cabeza, los tres protagonistas vas vestidos con indumentaria puramente renacentista. El lienzo muestra predominio de la influencia flamenca cuya fuerza fue en aumento durante todo el siglo XVII. Así, destacan las figuras alargadas en primer término, el tratamiento detallista de los tejidos en pliegues y lacerías, el uso vibrante del color…todo enmarcado en un paisaje de gran profundidad potenciada con el uso del sfumato en los planos más lejanos del lienzo.
La Escuela Colonial Peruana se desarrolló entre los siglos XVI y XVII tras la llegada de los españoles al país y como fruto de la influencia de tres grandes corrientes, la vertiente española, la italiana y la flamenca. La religión católica adquiere gran importancia al tener una decisiva función evangelizadora por lo que temas bíblicos, como el que presentamos en subasta, proliferan siguiendo las técnicas y modelos europeos.
Óleo sobre lienzo.
Medidas: 81 x 66 cm; 108 x 95,5 cm (marco).
Marco de cedro.
En esta obra se presenta como protagonista a una Virgen de rostro juvenil que en sus brazos sostiene a su hijo, Jesús, acompañada de dos figuras que podrían identificarse como San José sosteniendo el lirio de la pureza y Santa Ana, madre de la Virgen, ataviada con su velo blanco sobre la cabeza, los tres protagonistas vas vestidos con indumentaria puramente renacentista. El lienzo muestra predominio de la influencia flamenca cuya fuerza fue en aumento durante todo el siglo XVII. Así, destacan las figuras alargadas en primer término, el tratamiento detallista de los tejidos en pliegues y lacerías, el uso vibrante del color…todo enmarcado en un paisaje de gran profundidad potenciada con el uso del sfumato en los planos más lejanos del lienzo.
La Escuela Colonial Peruana se desarrolló entre los siglos XVI y XVII tras la llegada de los españoles al país y como fruto de la influencia de tres grandes corrientes, la vertiente española, la italiana y la flamenca. La religión católica adquiere gran importancia al tener una decisiva función evangelizadora por lo que temas bíblicos, como el que presentamos en subasta, proliferan siguiendo las técnicas y modelos europeos.
Árabe fumando
Francisco Pradilla Ortiz (Villanueva de Gállego, Zaragoza, 1848 – Madrid, 1921).
“Árabe fumando”.
Óleo sobre lienzo.
Firmado y localizado.
Adjunta certificado de Wilfredo Rincon.
Medidas: 60 x 32,5 cm; 77 x 48,5 cm (marco).
Francisco Pradilla inicia su formación como aprendiz de Mariano Pescador, pintor escenógrafo, y en la Escuela de Bellas Artes de San Luis de Zaragoza. En 1868 continúa sus estudios en la de San Fernando de Madrid, donde fue discípulo de Federico de Madrazo, Carlos de Haes, Carlos Luis de Ribera y Ponciano Ponzano. Completa su formación en estos años copiando obras de los grandes maestros del Museo del Prado. En 1874 consigue el Premio de Dibujo de la “Ilustración Española y Americana”, y obtiene la beca para estudiar en Roma, ciudad en la que residirá veintitrés años, hasta su nombramiento como director del Prado en 1897. En 1878 concurre a la Exposición Nacional de Madrid y obtiene la Medalla de Honor, la misma distinción que gana ese mismo año en la Universal de París. A raíz de estos éxitos le llegan numerosos encargos no sólo de España y Francia, sino también de América y otros países europeos. Realiza viajes por España y se interesa por plasmar escenas costumbristas plenas de gracia y color, apoyadas siempre en un excepcional dominio del dibujo. Si bien no realizó exposiciones individuales, sus obras formaron parte de muestras y certámenes en ciudades de todo el mundo, como Londres, París, Berlín, São Paulo o Buenos Aires. Fue director de la Academia Española en Roma, y miembro de las Reales Academias de San Fernando y San Luis, de la Academia Francesa y de la Hispanic Society de Nueva York. Obtuvo, entre otras condecoraciones, la Cruz de Isabel la Católica y la Legión de Honor. De los géneros pictóricos que cultivó, incluida la ilustración gráfica para publicaciones literarias, hay que destacar el de la pintura de historia, que fue el que más fama le proporcionó. Como retratista su actividad fue más restringida y de resultados desiguales cuando tuvo que abordar efigies de personajes fallecidos, pero ante modelos vivos consiguió retratos de serena expresividad y factura estudiada y entonada. También se dedicó a la pintura de género, bien de inspiración popular italiana o de asuntos de costumbres madrileñas o de Galicia, lugar de origen de su esposa y donde solía pasar algunas temporadas. Tanto en los cuadros de historia como en éstos, Pradilla demuestra una clara inclinación por las ambientaciones en exteriores, organizando las composiciones en amplias perspectivas panorámicas con multitud de figuras y motivos, interpretados con una depuradísima técnica. No obstante, lo más sobresaliente de su lenguaje es el sentido de la luz y de la atmósfera, bajo los que el apretado dibujo se suaviza y funde con el fondo luminoso mediante pequeñas pinceladas de un colorido rico en matices y pasta. La obra de Francisco Pradilla está presente en el Museo del Prado, los de Bellas Artes de Bilbao, Buenos Aires, La Habana y São Paulo, el MACBA de Barcelona, la Christchurch Art Gallery de Nueva Zelanda y el Museo Romántico de Madrid, entre otros.
Óleo sobre lienzo.
Firmado y localizado.
Adjunta certificado de Wilfredo Rincon.
Medidas: 60 x 32,5 cm; 77 x 48,5 cm (marco).
Francisco Pradilla inicia su formación como aprendiz de Mariano Pescador, pintor escenógrafo, y en la Escuela de Bellas Artes de San Luis de Zaragoza. En 1868 continúa sus estudios en la de San Fernando de Madrid, donde fue discípulo de Federico de Madrazo, Carlos de Haes, Carlos Luis de Ribera y Ponciano Ponzano. Completa su formación en estos años copiando obras de los grandes maestros del Museo del Prado. En 1874 consigue el Premio de Dibujo de la “Ilustración Española y Americana”, y obtiene la beca para estudiar en Roma, ciudad en la que residirá veintitrés años, hasta su nombramiento como director del Prado en 1897. En 1878 concurre a la Exposición Nacional de Madrid y obtiene la Medalla de Honor, la misma distinción que gana ese mismo año en la Universal de París. A raíz de estos éxitos le llegan numerosos encargos no sólo de España y Francia, sino también de América y otros países europeos. Realiza viajes por España y se interesa por plasmar escenas costumbristas plenas de gracia y color, apoyadas siempre en un excepcional dominio del dibujo. Si bien no realizó exposiciones individuales, sus obras formaron parte de muestras y certámenes en ciudades de todo el mundo, como Londres, París, Berlín, São Paulo o Buenos Aires. Fue director de la Academia Española en Roma, y miembro de las Reales Academias de San Fernando y San Luis, de la Academia Francesa y de la Hispanic Society de Nueva York. Obtuvo, entre otras condecoraciones, la Cruz de Isabel la Católica y la Legión de Honor. De los géneros pictóricos que cultivó, incluida la ilustración gráfica para publicaciones literarias, hay que destacar el de la pintura de historia, que fue el que más fama le proporcionó. Como retratista su actividad fue más restringida y de resultados desiguales cuando tuvo que abordar efigies de personajes fallecidos, pero ante modelos vivos consiguió retratos de serena expresividad y factura estudiada y entonada. También se dedicó a la pintura de género, bien de inspiración popular italiana o de asuntos de costumbres madrileñas o de Galicia, lugar de origen de su esposa y donde solía pasar algunas temporadas. Tanto en los cuadros de historia como en éstos, Pradilla demuestra una clara inclinación por las ambientaciones en exteriores, organizando las composiciones en amplias perspectivas panorámicas con multitud de figuras y motivos, interpretados con una depuradísima técnica. No obstante, lo más sobresaliente de su lenguaje es el sentido de la luz y de la atmósfera, bajo los que el apretado dibujo se suaviza y funde con el fondo luminoso mediante pequeñas pinceladas de un colorido rico en matices y pasta. La obra de Francisco Pradilla está presente en el Museo del Prado, los de Bellas Artes de Bilbao, Buenos Aires, La Habana y São Paulo, el MACBA de Barcelona, la Christchurch Art Gallery de Nueva Zelanda y el Museo Romántico de Madrid, entre otros.
El Rapto de Europa
Johannes Mytens o Jan Mijtens (Holanda, c.1614-1670) .
El Rapto de Europa.
Oleo sobre tela.
Reentelado.
Bastidor del siglo XIX.
Medidas: 132x185,5 cm.
Oleo sobre tela.
Reentelado.
Bastidor del siglo XIX.
Medidas: 132x185,5 cm.
El tema aquí representado procede de las Metamorfosis de Ovidio (libro II): Europa era la bella hija del rey de Tiro. Zeus se prendó de su belleza cuando paseaba por la playa por lo que decidió metamorfosearse en toro, el animal favorito de la joven. Europa comenzó a acariciar al animal hasta que se montó en su lomo. En ese momento Zeus se lanzó hacia el mar. Para evitar la caída, la joven se aferró a los cuernos y el animal se aleja de la orilla hasta llegar a Creta.
Mytens ha tratado el tema distanciándose tanto del tratamiento que le dieran coetáneamente Rubens y Rembrandt, que a su vez difieren entre sí. Mytens se centra en el instante de confianza plena de la dama montada en Zeus, antes de que éste arranca a la carrera. Rubens, en cambio (siguiendo a Tiziano), se interesó por la convulsión del cuerpo feminino, sujeta al toro solo por el cuerno. Rembrandt, por su parte, nos narró el rapto en sí, la huida por mar. La composición de Mytens es apacible, a pesar del denso cielo argénteo y dorado que anuncia el rapto. Ello le permite primar la descripción de los ropajes, de tersura aterciopelada, de las joyas reflejando la luz fría que baña el ambiente, las carnaciones marfileñas... Destaca el hábil trabajo de veladuras en el pañuelo agitado por el viento. El mirada animal está provista de fulgor, en contraste con su cuerpo lanudo. Eros, en escorzo, se acerca con su flecha, y tres querubines conducen a Zeus.
Destaca el trabajo volumétrico de los cuerpos, modelados por la luz y el color, así como la sensual plasticidad de calidades y atmósferas. Un exponente importante del barroco holandés, que a su vez se impregna del quehacer plástico flamenco.
Johannes Mytens fue un pintor de la Edad de Oro holandesa. Nació en La Haya. De acuerdo con Houbraken, fue discípulo de Anthony van Opstal y más tarde de Nicolas van der Horst. Sus dos tíos Isaac Mijtens y Daniël Mijtens eran pintores, y su hijo Cornelis se convirtió en grabador. Mytens se convirtió en miembro del Gremio de San Lucas en La Haya en 1642 y ayudó a establecer la Confradía de Pintura. Pintó para la realeza holandesa y se especializó en retratos, cuadros de género y alegorías históricas. Sus discípulos fueron Nicolaes Lissant, Gerard de Nijst, Adriaen Stalpert van der Wiele, Pouels van de Velde, Andries Thijsz. de Wit, y Urbanus Talibert van Yperen. Murió en La Haya.
Contador de sobremesa indo-portugués
Contador
de sobremesa indo-portugués, s.XVII.
Madera, marfil y carey.
Medidas: 22x34x24,5cm.; 22x34x44,5 cm.(abierta).
Contador indo-portugués en madera revestida de marfil y plafones de carey, con fileteado de marquetería. De estructura rectangular, a modo de pequeña arca, guarda en su interior 11 cajones con tirados de lágrima en metal, que a su vez esconden cajoncitos secretos en una de las gualdras laterales. La decoración, a pesar de su sobriedad, revela la influencia india, en sus aplicaciones y embutidos de marfil y carey, su greca de marquetería combinando ébano con maderas claras. Los plafones de carey también acusan una mano local, en su perfilado de arco inspirado en la arquitectura hindú.
El contador indo-portugués empezó a ser ejecutado por artífices locales en la península de Indostán, y en las provincias orientales portuguesas de la Costa del Malabar -Damao, Goa y Cochim, desde el siglo XVI. La denominación de Contador se remonta a la Italia del siglo XV. Eran pequeñas cajas, con tapa y con el espacio útil interior ocupado por cajones muy pequeños que servían de guarda-joyas. Durante el siglo XVII sufrió diversas adaptaciones, ajustándose a las exigencias de la época. Una pequeña caja dividida con cajones pasó a tener una base propia, cuerpo inferior con gavetas o puertas o una especie de marco de cuatro pies. Se convirtió en una pieza con funciones prácticas, utilizada para la custodia de documentos (“contos”) y objetos del cargo de Contador, utilizado también para guardar dinero, joyas, o papeles de importancia en sus múltiples cajones, distribuidos para poder encontrarse con celeridad. El contador Indo-portugués revela una simbiosis entre el arte portugués y el arte indio, en el que se destaca la aplicación de dibujos y técnicas originales con materiales exóticos. En ocasiones, la decoración incluía figuras de la mitología hindú esculpidas y complejas guarniciones. En todos los casos, un mueble de lujo muy apreciado y adquirido por las clases más acomodadas.
Madera, marfil y carey.
Medidas: 22x34x24,5cm.; 22x34x44,5 cm.(abierta).
Contador indo-portugués en madera revestida de marfil y plafones de carey, con fileteado de marquetería. De estructura rectangular, a modo de pequeña arca, guarda en su interior 11 cajones con tirados de lágrima en metal, que a su vez esconden cajoncitos secretos en una de las gualdras laterales. La decoración, a pesar de su sobriedad, revela la influencia india, en sus aplicaciones y embutidos de marfil y carey, su greca de marquetería combinando ébano con maderas claras. Los plafones de carey también acusan una mano local, en su perfilado de arco inspirado en la arquitectura hindú.
El contador indo-portugués empezó a ser ejecutado por artífices locales en la península de Indostán, y en las provincias orientales portuguesas de la Costa del Malabar -Damao, Goa y Cochim, desde el siglo XVI. La denominación de Contador se remonta a la Italia del siglo XV. Eran pequeñas cajas, con tapa y con el espacio útil interior ocupado por cajones muy pequeños que servían de guarda-joyas. Durante el siglo XVII sufrió diversas adaptaciones, ajustándose a las exigencias de la época. Una pequeña caja dividida con cajones pasó a tener una base propia, cuerpo inferior con gavetas o puertas o una especie de marco de cuatro pies. Se convirtió en una pieza con funciones prácticas, utilizada para la custodia de documentos (“contos”) y objetos del cargo de Contador, utilizado también para guardar dinero, joyas, o papeles de importancia en sus múltiples cajones, distribuidos para poder encontrarse con celeridad. El contador Indo-portugués revela una simbiosis entre el arte portugués y el arte indio, en el que se destaca la aplicación de dibujos y técnicas originales con materiales exóticos. En ocasiones, la decoración incluía figuras de la mitología hindú esculpidas y complejas guarniciones. En todos los casos, un mueble de lujo muy apreciado y adquirido por las clases más acomodadas.
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